viernes, febrero 12, 2010

Gente

Podemos dividir a la gente que me causa una buena primera impresión por la primera impresión que yo les causo. Tendríamos, entonces, dos grandes grupos; a los que les produzco indiferencia, y a los que les produzco antipatía. Hay otro pequeño grupo, claro, que se conforma por la gente a la que le causo cierta simpatía: gente que por lo general me produce inhibición, por lo extraño que este caso suele ser.
Estos dos grandes grupos suelen estar conformados de sujetos con características similares. Aquellos a quienes les causo indiferencia suelen ser personas que me causan interés,y aquellos a quienes causo antipatía suelen ser personas que me caen simpáticas. El tiempo suele subdividir a cada uno de los grupos en dos fracciones. El primer grupo se divide entre los que terminan aburriéndome y los que logro que se interesen en mí, y el segundo grupo se divide entre los que terminan viendo alguna cualidad en mí, y los que finalemente reciben el rótulo de "imbéciles que no pueden ver quién soy".

Siento esto como mi pequeña verdad social, y he sabido vivir con ello bastante bien durante toda mi vida. Pero voy notando que como cada vez hay más gente en el grupo que me cae simpático y al que le causo antipatía, y dentro de ese grupo es cada vez más frecuente que la subdivisión se de hacia el lado de gente que termina rotulada. El problema está en que cada vez me interesa más eso de ser sociable, y pongo más esfuerzos en causar simpatía en esta gente que me cae simpática, logrando como único resultado que se mantengan firmes en su primera impresión y que a mí cada vez me cuesta más ser soberbio y rotularlos categóricamente.

1 comentario:

Javiera Menay C. dijo...

La primera vez que leí esto no supe que decir, hace un par de horas atrás. Esta es la segunda vez, y decidí intentarlo. Supongo que te entiendo en parte, principalmente en el costo que tiene integrarse socialmente para algunas personas, entre las cuales me incluyo en ciertas ocasiones. ¿Será esa categórica soledad causa de tus letras? ¿O serán tus letras causa de esa soledad?

Me llamó mucho la atención tu entrada.